El reconocido médico era una de las personalidades más destacadas de Empalme Villa Constitución, cuya Comisión Comunal lo declaró “Ciudadano Ilustre” en 2018.
La Comuna de Empalme Villa Constitución comunicó este lunes “con profundo pesar, el fallecimiento del Dr. Manuel Gregorio Vicente Araujo, médico de larga trayectoria al servicio de nuestra comunidad, quien vivió su profesión apasionadamente y se brindó por el bienestar de nuestra gente sin distinciones, sembrando amor y contención en su tránsito”.
En su mensaje, la Comisión Comunal hizo llegar sus “condolencias a familiares, amigos y personal de la Clínica Empalme, de cuya conducción formó parte durante tantos años, al tiempo que expresa su dolor y respeto ante este difícil momento a Santiago Ventura, uno de sus nietos, integrante de esta Comisión Comunal”. “Gracias, querido “Chichín”. Descansa en paz”, finaliza la evocación oficial.
También el diputado provincial Juan Cruz “Cacu” Cándido, oriundo de Empalme, se refirió al fallecimiento del destacado médico. “Empalme y toda la región despedimos con mucho pesar al Dr. Manuel Araujo”, manifestó en una publicación en redes sociales. “El Dr. Chichín ejerció la medicina y pasó por la vida de todos nosotros con profesionalismo y enorme sentido del humanismo y la sensibilidad. Entendió su tarea como un compromiso con la sociedad y como una manera de ayudar a mejorarla”, lo recordó Cándido.
“Hoy, ante su fallecimiento, queremos evocarlo, agradecerle y saludar a familiares, afectos y quienes recorrieron con él su paso por la salud como servicio a los demás”, concluyó el legislador.
Por su parte, el expresidente comunal Roberto González resaltó la vocación de servicio y el compromiso del destacado médico. “Hasta siempre, querido Dr. Manuel Araujo. Quedarás por siempre en la mente y el corazón de tu gente a la que tanto serviste generosamente. Gracias por la amistad que me dispensaste. Te abrazo desde el fondo de mi corazón. Mis condolencias a su familia”, escribió en Facebook.
“Desde Clínica Empalme despedimos a nuestro querido Dr. Manuel Araujo”, comienza la publicación del centro médico en las redes sociales “Recordaremos por siempre su legado, su profesionalismo y, por sobre todas las cosas, su calidad humana, dentro y fuera del consultorio. Acompañamos a su familia en este difícil momento”, finaliza el mensaje.
Una vida dedicada al arte de curar
Manuel Gregorio Vicente Araujo nació el 19 de septiembre de 1931 en Pueblo Aguirre, hoy denominado Arroyo Seco, provincia de Santa Fe. Sus padres fueron María Teresa Romanini y el doctor Manuel Araujo.
Cursó sus estudios primarios en su pueblo natal y los secundarios y universitarios en la ciudad de Rosario, egresando como médico en junio de 1962.
Recién recibido trabajó en la guardia médica de la fábrica SOMISA, en momentos en que se construían las estructuras de los altos hornos, debiendo asistir al personal que en muchas ocasiones sufría accidentes de suma gravedad por el riesgo que implicaba la obra.
También en 1962 se incorporó a la Clínica Empalme, que había sido fundada por su padre unos años antes. Esta tarea lo marca en su forma humanitaria y comprometida de ejercer la medicina, algo que determinará su trayectoria de 50 años como Clínico integral, obteniendo un generalizado reconocimiento y muestras de afecto por parte de sus pacientes, que abarcaban no solo la población de sugerido Empalme sino de pueblos y ciudades cercanas quiénes acudían por una fidelidad casi religiosa a su atención pese a muchas veces tener que enfrentar varias horas de espera por una consulta con su médico amigo, el Negro Araujo, el querido Chichín.
Su vocación se reflejaba en cada encuentro donde el arte de escuchar, de indagar y aconsejar sabiamente, conociendo el contexto de cada paciente, se sumaba a su sólida formación científica que mantuvo siempre actualizada concurriendo cada viernes de su vida profesional al Hospital Centenario para pasar sala con sus maestros y compartir casos de difícil diagnóstico.
Araujo se caracterizó también por su generosidad hacia sus colegas, abriendo las puertas de la clínica para la llegada de nuevos profesionales que abarcaron otras especialidades. Así se integraron los médicos Roberto Foradini, Omar Maggioni (su actual director), Pablo Flores y María Fernanda Di Giacinti, entre otros, posibilitando que su pueblo contara con un servicio en salud que por su calidad fue destacado regionalmente.