Estafas online y telefónicas: conocé las estrategias que usan los delincuentes

Villa Constitución

En los últimos días se registró una nueva ola de engaños telefónicos, con falsas llamadas de Anses, Desarrollo Social o AFIP, el anuncio de algún premio, el acceso a la reparación histórica para jubilados o a planes de vivienda. También te contamos los engaños en compras online, operaciones en las redes, falsos mensajes de bancos y la “estrategia del triple engaño”.

Las bandas, según coincidieron en señalar los investigadores, no siempre realizan un estudio previo para elegir a las víctimas, sino que en una jornada pueden realizar centenares de comunicaciones hasta que encuentran algún desprevenido.

La maniobra, por lo general, es así:

– Estafador: Buenas tardes.
– Víctima: Buenas…
– E: Nos comunicamos de Anses para ofrecerle un crédito a tasa cero. Se lo da por única vez y usted fue elegido por su buen comportamiento financiero.
– V: ¡Qué bueno! ¿Qué trámite debo realizar?
– E: es muy simple. ¿En qué tiempo puede estar delante del cajero más cercano?
– V: Y, en una hora aproximadamente.
– E: Bueno. Diríjase hasta ese lugar que nos comunicaremos nuevamente.

Pasa el tiempo previsto y el estafador vuelve a llamar y le pide a la víctima que realice algunas maniobras para generar claves, datos que termina anotando.
– E: Bueno señor, hemos terminado la tarea. Dentro de 24 horas estará el dinero depositado. No realice ningún trámite porque se anulará la operación.
Al día siguiente, el damnificado descubre que no realizaron ningún depósito y que no tiene dinero en sus cuentas y, a veces, que accedieron a los créditos preacordados a los que pueden acceder sus víctimas a través del home banking.

Son al menos seis las estrategias conocidas para realizar este tipo de engaño. Además de la de Anses, se conocen las “versiones” de reintegros en efectivo de la AFIP, créditos blandos del Ministerio de Desarrollo Social, sorteos de vehículos, motos o electrodomésticos, reparación histórica de las jubilaciones y acceso a planes de vivienda.

Pero como el ingenio popular nunca se detiene, más aún el de los delincuentes, permanentemente están cambiando de situaciones para concretar el engaño. Los investigadores explicaron que las personas que reciben estos llamados, antes de aceptar la propuesta, deben verificar la existencia de estos planes.

Compras en la web

Hay ofertas que se transforman en problemas. Hoy te contamos el caso de Jorgelina, quien pretendía cambiar su celular. Un amigo le había comentado que podría hacerlo cuando se lanzara un programa de ofertas en las redes y que duraría una semana. La joven docente esperó pacientemente la fecha. A la madrugada empezó a bucear por ese mar de ofertas.

Encontró una página en la que le ofrecían el aparato un 30% más barato que en los otros sitios. No dudó y realizó la compra transfiriendo el monto desde su cuenta a la que le habían indicado.

Como el celular no llegaba, comenzó a preocuparse. Empezó a realizar las averiguaciones, denunció el hecho y le dijeron que había sido estafada porque había realizado su compra en una página trucha de un comercio que no existía.

La recomendación que dan los especialistas es que accedan a páginas oficiales de comercios reales y que se trate de averiguar los datos del vendedor en los comentarios que realicen otros compradores o en las calificaciones que les otorgan a los comerciantes los mismos sitios que realizan las ventas.

Operaciones en las redes

Fernando decidió vender un ropero en Facebook. Se contactó con él un joven que dijo que lo quería. Después de contarle todos los detalles, dijo que lo reservaría pagándole la mitad de su valor. El vendedor aceptó el trato.

Al día siguiente recibió un llamado del comprador avisándole que le había transferido más de lo acordado y, como ya había superado el monto permitido de transferencia sin hacer una declaración jurada, le avisó que lo llamaría su ejecutivo de cuentas que le explicaría como solucionar el problema.

A la media hora, lo llamó esa persona y, después de dar muchas explicaciones, consiguió sus datos de cuenta. Solucionó el problema, la víctima confirmó la veracidad de lo dicho y se quedó tranquilo. Pero a la media hora descubrió que no podía ingresar a su home banking. Llamó al banco y ahí le confirmaron que había sido estafado porque se apoderaron de todos sus fondos.

Los especialistas sostienen que las redes sociales no son lugares seguros para operar y, si se lo hace, se debe tomar los recaudos necesarios como conocer el perfil del comprador, pactar el pago en lugares seguros (nunca en su domicilio) y utilizar medios de pago confiables.

Mensajes tentadores

Christian recibió en su casilla de correo un mensaje del banco en el que cobra su sueldo. En el mail, por sus ingresos, le ofrecían transformarse en cliente VIP que le abría la puerta de algunos privilegios. Para acceder, lo invitaban a acceder a través de un link. Lo hizo, y en una página trucha de la entidad financiera, lo invitaban a poner todos sus datos personales y, fundamentalmente, las claves. Con esos elementos, los estafadores se quedaron con todo su dinero y sacaron un crédito a su nombre.

Los expertos en seguridad bancaria sostienen que antes de acceder a cualquier tipo de promociones, los clientes deben constatar la veracidad de esa oferta a través de las vías de comunicación legal de los bancos.

Promociones bancarias

Instagram y Twitter también se transformaron en las herramientas para engañar a personas. Enviándoles mensajes a través de esas cuentas, los estafadores consiguieron cometer ilícitos en los últimos tiempos. Los embaucadores, utilizando cuentas “truchas” ofertan créditos a tasas muy bajas, la entrega de tarjetas con amplísimo margen y un ventajoso sistema para comprar moneda extranjera.

A las víctimas que caen en la trampa, se les solicita que le envíen un número de teléfono (preferentemente son celulares) para que un ejecutivo se comunique con ellos “a la brevedad”. Y eso es lo que finalmente sucede. Un joven o una joven (según el sexo del damnificado) con una amabilidad y dulzura poco creíble para un empleado bancario, se comunica y les explica cuáles son las ventajas del nuevo acuerdo y les solicitan datos personales. Cuando lo consiguen, en cuestión de minutos, ingresan a sus cuentas para apoderarse del dinero.

Los especialistas de seguridad bancaria sostienen que la mayoría de los bancos no ofrecen promociones a través de estas redes sociales, sino que utilizan otros canales. Advirtieron además que ante cualquier duda, antes de realizar cualquier operación, se comuniquen con los 0800 que tienen los entidades.

La estrategia del triple engaño

Una persona, equivocadamente, ingresó a una página de servicios privados. En el sitio, los clientes debían comunicarse a través de un número de WhatsApp. El desprevenido lo hizo y realizó las averiguaciones correspondientes. En el trámite, le exigieron que brindara todos sus datos personales, empresa de telefonía de celular que tenía y una foto de ambos lados del DNI. A las pocas horas, se quedó sin señal de celular y constató que desconocidos se habían quedado con el dinero que había en sus cuentas.

Por su iniciativa descubrió que era lo que había ocurrido y la fragilidad de las medidas de seguridad que toman las empresas. El estafador, con sus datos se comunicó a la empresa de telefonía para solicitar un cambio de chip de su celular. Acordó con la persona que lo atendía que ese elemento lo buscaría un tercero en una sucursal de Rosario, a pesar que tenía domicilio en Villa Constitución.

Con el chip en su poder, lo colocaron en otro teléfono y descubrieron con qué banco operaba. Se comunicaron con la entidad financiera para realizar un desbloqueo de clave y le mandaron un SMS de verificación de datos. El delincuente pudo ingresar así a sus cuentas, cambiar los dólares que tenía y transferirlos a otra cuenta. Todo en menos de seis horas.

Los investigadores señalaron que ninguna persona debe enviar sus datos personales a terceros, menos una imagen de un documento que puede ser fácilmente utilizada para cometer diferentes ilícitos.