El intendente de Villa Constitución, Jorge Berti, remitió esta semana al Concejo Municipal un Proyecto de Ordenanza que propone restituir el Sistema de Estacionamiento Medido (SEM) en la zona céntrica de la ciudad, actualizado con nuevas tecnologías a través de una aplicación para celulares. El proyecto contempla que el arancelamiento del estacionamiento se aplique de lunes a viernes, de 9 a 13 y de 17 a 20, con un costo de $200 por hora.
El área de aplicación del SEM incluiría las siguientes arterias: Avenida San Martín y calles Rivadavia y Belgrano, desde 14 de Febrero hasta Catamarca; las calles Jujuy, Salta, Eva Perón, Lisandro de la Torre, Hipólito Yrigoyen, Entre Ríos, Córdoba, Ingeniero Acevedo, Mendoza, San Juan, Santiago del Estero y Catamarca, desde Sarmiento hasta Moreno; y la Avenida 14 de Febrero, desde Sarmiento hasta Pbro. Daniel Segundo. Además, el proyecto prevé la posibilidad de extender el sistema a nuevas zonas en caso de congestión vehicular, eventos especiales u otras circunstancias que lo requieran.
La fiscalización del cumplimiento de pago y el labrado de actas en caso de infracción estarán a cargo de agentes designados por la Municipalidad. En el área administrativa del Departamento de Inspección General, se incorporará una oficina dedicada a la operación del SEM, brindando soporte al usuario y resolviendo problemas. Asimismo, se ofrecerá una modalidad de pago alternativa a la app para aquellos que no utilicen medios tecnológicos.
La propuesta del Departamento Ejecutivo Municipal establece que el 10% de la recaudación generada por el estacionamiento medido y las multas derivadas de su incumplimiento será destinado a gastos de infraestructura, transporte público, seguridad vial u otros fines afines. El resto de la recaudación se destinará a Rentas Generales, de libre disponibilidad.
El proyecto también contempla excepciones para vehículos oficiales, ambulancias, patrulleros, móviles de Bomberos Voluntarios, entre otros, así como áreas delimitadas para el estacionamiento de motos, espacios exclusivos para personas con discapacidad, zonas reservadas a agencias de remises y un descuento en un abono mensual para vecinos frentistas que residan en la zona sin cochera propia o alquilada.
En forma complementaria, se plantea la necesidad de cumplir con la Ordenanza N° 4910, sancionada en 2020, que obliga al Municipio a ajustar el estacionamiento general en la ciudad según la Ley Nacional de Tránsito, bajo la modalidad de estacionamiento paralelo al cordón, según el sentido de circulación de la calle.
En la sesión del miércoles pasado, el proyecto tuvo su ingreso formal y fue derivado a la Comisión de Gobierno para su análisis y evaluación.
Cabe recordar que el Sistema de Estacionamiento Medido fue creado en 2012 y sufrió numerosas modificaciones a lo largo de los años, hasta su suspensión en marzo de 2020 como consecuencia de la emergencia sanitaria por la pandemia de Covid-19. Desde entonces, su regreso había sido objeto de rumores, pero ahora se formaliza la intención de las autoridades locales. “Es necesario e imperioso implementarlo nuevamente a los fines de ordenar el tránsito en el centro de la ciudad, lo que conllevará además a generar recursos para el erario público en beneficio de toda la comunidad”, argumentan.
Evolución del estacionamiento medido
El Sistema de Estacionamiento Medido (SEM) no es una novedad en el contexto urbano de nuestro país, siendo implementado en numerosas ciudades desde hace varias décadas, con el objetivo de ordenar el tránsito en las zonas céntricas, desincentivar el uso excesivo del automóvil particular en zonas congestionadas y generar ingresos que se destinan a mejoras en infraestructura y servicios públicos.
La adopción de nuevas tecnologías, como aplicaciones móviles para el pago del estacionamiento, logró modernizar estos sistemas, como ocurre en Rosario, haciéndolos más accesibles y eficientes tanto para los usuarios como para las administraciones municipales.
Históricamente, el estacionamiento medido surgió como una respuesta a la creciente demanda de espacios de estacionamiento en zonas comerciales y céntricas, donde la disponibilidad de lugares era limitada y la rotación vehicular era baja.
En Argentina, su implementación comenzó en grandes ciudades durante los años 80 y 90, adaptándose a las necesidades locales y evolucionando con el tiempo.
Hoy en día, el SEM se considera una herramienta clave para gestionar el uso del espacio público, reducir el tráfico y fomentar el uso de alternativas de transporte más sostenibles, como el transporte público y la movilidad activa, aunque en este punto la ciudad de Villa Constitución sufre un gran atraso, ya que no posee líneas de colectivo local y la infraestructura en bicisendas o ciclovías es insuficiente.
La experiencia de otras ciudades demuestra que, cuando se implementa correctamente, el estacionamiento medido puede mejorar significativamente la calidad de vida en las zonas más concurridas.
