El gobierno nacional quitó todos los subsidios del transporte para las provincias, al eliminar el Fondo Compensador del Interior. Desde ahora las empresas de colectivos podrán cobrar el precio que quieran.
Esta política de precios liberados fue anunciada luego de que el presidente Javier Milei insultara a los gobernadores que no apoyaron la ley Ómnibus.
Este mes ya había reducido el subsidio en el área metropolitana de Buenos Aires, provocando un aumento del 250%, que llevó el boleto de colectivo a 270 pesos.
El gobernador de Santa Fe, Maximiliano Pullaro, aseguró que “nunca” creyó que “iban a cortar los subsidios” al transporte. “Nosotros vamos a mantener el subsidio que tiene la provincia de Santa Fe con el transporte. Pero no nos podemos hacer cargo de lo que Nación no manda”, afirmó a la prensa desde la localidad de San Javier. “Nos han dejado la provincia con un déficit muy pero muy grande”, afirmó Pullaro.
Por su parte, el gobernador de Mendoza, Alfredo Cornejo, señaló que “la eliminación de subsidios de transporte para el interior del país, sosteniendo los del AMBA, incumple el Pacto Fiscal de 2017”.
Más de cien intendentes de todo el país, de distintas fuerzas políticas, se sumaron al rechazo expresado por la mayoría de los gobernadores a la quita de los subsidios para el transporte de las provincias: “No es contra los intendentes, es contra los millones de estudiantes, enfermeros, trabajadores que diariamente utilizan el transporte público para movilizarse en sus respectivas ciudades”, sostuvieron en un comunicado.
Tras la quita de subsidios al transporte de las provincias, en muchas ciudades el boleto de colectivo podría superar los 1.000 pesos.