Sigue la crisis en el Gobierno: el Presidente pierde a otra persona de confianza. Desde su Ministerio se había cuestionado a funcionarios de La Cámpora por la licitación del gasoducto Néstor Kirchner. Cristina salió a cruzarlo duro y Alberto le pidió la renuncia. “Confío en la integridad moral y en la idoneidad de quienes llevan adelante la licitación de esa obra”, expresó el máximo mandatario.
El enojo de Cristina Fernández expresado a través de un tuit fue más que suficiente: el presidente Alberto Fernández se vio obligado a echar de su gobierno al ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas. ¿La causa? Desde su área volvieron a hacerle frente a la Vicepresidenta y a los funcionarios de La Cámpora denunciándolos por presuntas irregularidades en la licitación de los caños del gasoducto Néstor Kirchner.
Luego se confirmó que Daniel Scioli, actual embajador en Brasil y ex candidato presidencial, será el reemplazante, con el aval de los tres sectores internos del Frente de Todos: el cristinismo, el albertismo y el de Sergio Massa.
La salida de Kulfas constituye el cambio N°12 que Fernández hace en el equipo de 32 funcionarios que presentó el 7 de diciembre de 2019 en Puerto Madero. El 40 por ciento de aquellos ya no está en su puesto original, sin contar con el lamentable fallecimiento de Mario Meoni en abril de 2021.
Todos los removidos están identificados como “albertistas”. El Presidente nunca echó a un ministro que respondiera a Cristina. Según señalaron medios nacionales este fin de semana, ahora quedan otros funcionarios muy cercanos al Presidente a los que el kirchnerismo tiene en la mira: Martín Guzmán, ministro de Economía; Claudio Moroni, ministro de Trabajo; y Miguel Pesce, titular del Banco Central.
El texto de la discordia
El viernes les llegó a periodistas de Infobae y La Nación un texto sin firma. Era un off the record que respondía al pedido que Cristina le había hecho a Fernández en el acto de YPF para que “use la lapicera”, es decir, que gobierne como ella quiere. Aunque sin dar nombres, ese off contempla una denuncia grave contra la empresa Energía Argentina, conducida por Agustín Geréz, quien es integrante de La Cámpora.
La denuncia señala que Geréz y otros funcionarios de la Secretaría de Energía “fijaron las condiciones para darle la construcción de las cañerías del gasoducto de Vaca Muerta a Techint”. “Los que no usaron la lapicera como corresponde fueron los funcionarios de IEASA (designados por Cristina). Ellos armaron un pliego de licitación a la medida de Techint y de la chapa que el grupo fabrica en Brasil, de 33 milímetros de espesor. Si hubieran puesto 31 milímetros, como son los gasoductos en Europa, se podría haber provisto caños desde otra firma que produce en Villa Constitución (Laminados industriales SA)”, dice el texto.
El documento enviado en off también señala que las válvulas para el gasoducto fueron adjudicadas a una empresa importadora cuando había una local que ofrecía “condiciones similares”, incumpliendo así la ley de Compre Nacional. “En definitiva, los que están usando incorrectamente la lapicera son los funcionarios de Cristina”, concluye el texto.