Las cifras son preocupantes: durante 2021 fallecieron en su lugar de trabajo 65 personas y se registraron 40.318 accidentes laborales. La mayoría fueron pisadas, choques o golpes con objetos, seguido por caídas de personas y esfuerzos excesivos. Santa Fe es el cuarto distrito en cantidad de casos notificados, detrás de la provincia de Buenos Aires, CABA y Córdoba.
Según un informe elaborado por Preven100, consultora de Seguridad y Salud Laboral, en todo el territorio santafesino hubo el año pasado 40.318 accidentes laborales; la mayoría (27.403) fueron acontecimientos súbitos y violentos ocurrido por o en el trabajo.
“Son datos oficiales, que corresponden al último reporte de la Superintendencia de Riesgos del Trabajo de la Nación (SRT), el organismo de control que se creó con la Ley 24.557 y que tiene como principales funciones controlar y monitorear el desempeño de los actores que componen el Sistema de Riesgos del Trabajo, como las ART y las comisiones médicas”, explicó la Lic. Mariana Bouvier, titular de la consultora Preven100.
En relación a las cifras correspondientes a Santa Fe, la especialista indicó que, según ese documento, en la provincia se verificó un promedio de 110 accidentes laborales por día y añadió que, durante 2021, fallecieron en su lugar de trabajo 65 personas.
“Debemos aclarar que estos datos corresponden solamente a las y los trabajadores registrados y los accidentes denunciados ante las ART; por lo que no se incluyen monotributistas, trabajadores informales y los eventos que no se denuncian”, indicó Bouvier.
Las estadísticas
Según la clasificación por tipo de lesión, entre enero y diciembre de 2021 hubo 12.942 contusiones, 5.236 distensiones musculares, 4.534 esguinces y 3.220 fracturas, entre otras.
A su vez, 2.552 personas se enfermaron por causa del lugar o del tipo de trabajo. En tanto, 7.739 sufrieron accidentes laborales en el camino desde o hacia el trabajo (in itinere).
También se verificaron 2.624 casos de “reingreso” o personas que habían sufrido un accidente laboral o una enfermedad profesional y que, habiendo cesado la incapacidad laboral temporaria, padecieron un agravamiento de su cuadro antes diagnosticado.
La mayoría de los accidentes (11.361) se registró en los trabajadores que se desempeñan en la industria manufacturera, entre las que se encuentran la metalmecánicas, las madereras, las ensambladoras, la industria de alimentos y bebidas, y las plantas de reciclaje, entre otras. El segundo grupo con mayor cantidad de casos (5.796) es el comercio al por mayor y al por menor, principalmente en el rubro reparación de vehículos automotores y motocicletas. La tercera actividad económica con más accidentes laborales es la construcción (4.368).
El reporte de Preven100 indica que, según las estadísticas del organismo nacional, los hombres protagonizaron el 80% de los accidentes laborales notificados, mientras que las mujeres el 20%.
En cuanto a la edad de los damnificados, la mayoría de los accidentes laborales los sufrieron personas de entre 30 y 39 años (31,5%), un fenómeno que se repitió también en 2020, y le siguieron las de entre 20 y 29, que fueron víctimas del 25,6% de los incidentes.
Los trabajadores de entre 40 y 49 años protagonizaron el 23,8% de los accidentes y en porcentaje le siguieron los empleados de entre 50 y 60, con el 14,4%. Los de más de 60 sufrieron el 3,5% de los incidentes y los más jóvenes, de entre 16 y 19 años, el 1 por ciento.
Características de los accidentes
Del total de los accidentes registrados durante todo el año pasado, la mayoría (8.913) fueron pisadas, choques o golpes con objetos y le siguieron 7.311 caídas de personas, causadas por realizar actividades sin los elementos de seguridad o con éstos mal colocados.
A su vez, 1.372 personas sufrieron percances por la caída de objetos, clasificación que abarca desde un desmoronamiento hasta un elemento de trabajo que se sostiene con una mano.
En la provincia, 6.958 personas sufrieron accidentes laborales por esfuerzos excesivos por levantar o mover objetos.
En menor medida, se registraron percances por atrapamientos por objetos o entre objetos, por exposición a altas temperaturas, a la corriente eléctrica o a sustancias nocivas, entre otras.
Dentro de los tipos de lesiones sufridas, la mayoría (12.942) padeció contusiones, distensión muscular (5.236), esguinces (4.634), y fracturas (3.220).
Los miembros superiores fueron los más afectados (13.836), seguidos de los inferiores (11.807) y la cabeza (4.697). Además, el año pasado se contabilizaron 69 personas con daños psíquicos y 2.542 con lesiones en varios miembros.
Por otra parte, 30.778 trabajadores fueron diagnosticados con traumatismos, envenenamiento y algunas otras consecuencias de causas externas. Casi 7 mil personas fueron diagnosticadas con enfermedades osteomusculares y en el tejido conjuntivo; y 850 padecieron problemas en el oído y en las cervicales. A su vez, 74 padecieron trastornos mentales y del comportamiento, y 402 afecciones en el sistema nervioso.
Por último, se detectaron 4.997 casos de accidentes que dejaron secuelas incapacitantes en los trabajadores, un 12 por ciento más que en 2020.
