Las obras premiadas son testimonio de que en la academia de arte que dirige Cristina Espasandín se cultiva algo más que técnica pictórica: se siembra la capacidad de ver el mundo con ojos creativos.
En un contexto donde las fronteras a veces parecen infranqueables, el pincel de un niño o una niña puede ser el pasaporte más poderoso. Así lo demostraron los estudiantes del Taller del Sol, cuya creatividad cruzó el océano para dejar huella en el XV Concurso Internacional de Arte Infantil y Juvenil Trejdegsnis/Triple Sun en Letonia.
Bajo el tema “El árbol de la vida”, el certamen reunió a artistas de todas las edades. Entre cientos de trabajos de todo el mundo, cinco creaciones de Villa Constitución recibieron un reconocimiento especial.
Los galardonados fueron:
- Valentino Quiroga (7 años): “El árbol de la vida”
- Amelie Curia (11 años): “Árbol con mucha vida”
- Santiago Maldonado (11 años): “La vida y la muerte”
- Alma Mancini (16 años): “El nacimiento de la felicidad”
- María Laura Neumann (adulta): “Símbolo de esperanza” (la única adulta, quien además recibió un premio especial del Jurado).
La profesora María Cristina Espasandín, directora del taller, comparte sus sensaciones: “Somos creadores con una clara visión del desarrollo del arte infantil. Nos sentimos orgullosos de nuestros logros, de haber trascendido las fronteras con el arte de nuestros niños y de ser reconocidos internacionalmente”.
Una tradición que crece
Como en ediciones anteriores, el Taller del Sol fue el único representante argentino en este prestigioso concurso. Los diplomas obtenidos no son solo un reconocimiento al talento individual, sino también a la metodología de trabajo que desde hace años implementa esta escuela villense.
“Como en otras oportunidades fuimos los únicos representantes de Argentina”, destacó Espasandín, confirmando el lugar privilegiado que ocupa el Taller del Sol en el circuito internacional de arte infantil.
