La instalación de los carteles con los nombres de las calles es una demanda de los habitantes del barrio, pero la decisión de trasladar el costo a los frentistas genera interrogantes. Si bien el Municipio ofrece cuotas accesibles, el esquema de contribución de mejoras podría tensar las relaciones entre la administración local y los vecinos.
Antes de iniciar su período de licencia -que se extenderá hasta el 18 de enero inclusive-, el intendente Jorge Berti envió al Concejo Municipal un proyecto de ordenanza para declarar “de utilidad pública” la compra y colocación de nomencladores en el barrio Villa Don Carlos, cuya financiación recaerá directamente sobre los vecinos a través del régimen de contribución de mejoras. La propuesta contempla un plan de pago de hasta 12 cuotas mensuales, ajustadas a las posibilidades socioeconómicas de los frentistas.
El expediente ingresó al Concejo el pasado 26 de diciembre, fuera del período de sesiones ordinarias, y aún no fue tratado. Según los fundamentos presentados por el Departamento Ejecutivo Municipal (DEM), la obra apunta a “progresar en el urbanismo” del sector, asegurando “mayor seguridad y orden” mediante la correcta señalización de calles, numeración y sentidos de circulación.
En la comunicación girada al órgano legislativo, el DEM afirma que cuenta con el proyecto técnico correspondiente para esta obra y señala que fueron los propios vecinos quienes “solicitaron la contemplación de la misma a través del régimen de contribución de mejoras”.
Sin embargo, un error en el texto podría generar ajustes en su tratamiento legislativo: el documento menciona que “resulta necesaria e imprescindible la obra de cordón cuneta”, en lugar de referirse a la colocación de nomencladores.
Otro aspecto relevante es el artículo 7° del proyecto, que solicita la autorización para contratar de manera directa la ejecución de la obra, pese a que el monto total seguramente requerirá un llamado a licitación. Esta cláusula podría generar cuestionamientos dentro del recinto deliberativo.
El proyecto lleva las firmas de Jorge Berti, del Secretario de Finanzas y Administración, Mauro Puccini; y del Secretario de Gobierno y Coordinación de Gabinete, Gonzalo Guagnini.