En la Sede Nacional de la Central de Trabajadores de la Argentina (CTA Autónoma), en la Ciudad de Buenos Aires, este viernes se rindió un homenaje al dirigente metalúrgico Alberto Piccinini, uno de los fundadores de la CTA, líder del “Villazo” e histórico referente de la UOM Villa Constitución y del sindicalismo combativo. La Sala de Reuniones ubicada en el cuarto piso de la central obrera lleva ahora su nombre.
La ceremonia contó con la presencia de numerosos villenses, dirigentes históricos del Villazo y familiares, junto a integrantes de la Mesa Memoria, Verdad y Justicia, quienes fueron invitados especialmente por la CTA.
El acto se inició con la lectura de una breve reseña sobre la figura de “Pichi” e inmediatamente después se ofreció un espectáculo musical a cargo del cantor de tangos Esteban Riera.
Más adelante se compartió en pantalla gigante un emotivo video, que incluimos al final de este artículo; y llegó el turno de las palabras de Ricardo Peidro, secretario general de la CTA-A.
“Alberto nos enseñó que la militancia es lucha, es caer y levantarse para seguir luchando, aún en los momentos más difíciles, hasta la victoria o hasta el fin de los días. Así fue la vida de Alberto Piccinini, a quien no pudieron quebrar pese a sufrir la represión y la cárcel. Entró a la cárcel como militante y salió de ella queriendo transformar la realidad y luchar por un mundo mejor”, destacó Peidro.
A continuación se invitó al escenario al dirigente villense Juan Actis, quien expresó su orgullo por estar presente en el homenaje “a un amigo del barrio, a un compañero de fábrica, de lucha, de cárcel, pero sobre todas las cosas, un compañero de la vida”.
“Si hay alguien de quien debemos tomar el ejemplo y seguir la dignidad que ha tenido como persona es el compañero Alberto Piccinini, quien debe ser un espejo para los jóvenes, que nunca pierdan la convicción, la honestidad ni la dignidad que supo construir el Cabezón junto con un grupo de compañeros”, agregó.
El profesor Ernesto Rodríguez, especialista en la historia del movimiento obrero, gran conocedor de la historia del Villazo y de la vida de Piccinini, y coordinador de la Mesa Memoria, Verdad y Justicia de Villa Constitución, eligió una famosa frase de Rodolfo Walsh para iniciar su participación en el acto: “Las clases dominantes siempre han procurado que los trabajadores no tengan historia, no tengan doctrina, no tengan héroes, ni mártires. Cada lucha debe empezar de nuevo, separada de las luchas anteriores. La experiencia colectiva se pierde, las lecciones se olvidan”. “Pero en Villa Constitución cambiamos la historia y transformamos la frase. En Villa Constitución tenemos historia, tenemos memoria, tenemos héroes y quisiéramos tener menos mártires, pero lamentablemente la represión fue feroz y aquí tenemos muchos familiares de las víctimas”, sostuvo “Chicharra”.
“También tenemos que decir que las luchas en Villa Constitución no han comenzado siempre de nuevo, las esperanzas no se perdieron y tampoco la experiencia colectiva. Eso fue posible porque hubo personas como Alberto Piccinini y tantos otros dirigentes que nos enseñaron a mantener viva la memoria y por eso queremos hoy recordarlos”, manifestó.
Posteriormente habló Marcelo Cortez, secretario general de la CTA-A de Villa Constitución. “Alberto es el orgullo de los villenses, por eso fue declarado en su momento Ciudadano Ilustre”, subrayó. Y recordó el apoyo que recibieron de “Pichi” los trabajadores municipales para plantarse contra el unicato sindical. “Tenía una visión amplia sobre la libertad sindical y el derecho a expresarse”, indicó.
Silvio Acosta, integrante de la Comisión Interna de UOM en Acindar, enfatizó que “a Pichi lo recordamos con alegría”, fue “el tipo que peleó contra la burocracia sindical, enfrentó a la dictadura militar y le puso el cuerpo a esa lucha; nos enseñó a discutir a fondo en los comedores de la fábrica y nos animó a los trabajadores a discutir política”.
También participaron como oradores Manuel Casas, secretario adjunto de la Unión Obrera Metalúrgica – Seccional Villa Constitución; Guillermo Díaz, dirigente de la Federación de Trabajadores de la Energía – FeTERA; y Hugo “Cachorro” Godoy, secretario general de ATE Nacional y adjunto de la CTA Autónoma.
La historia de un grande
Alberto José Piccinini nació en La Vanguardia, Santa Fe, el 9 de mayo de 1942. Haciendo honor al nombre de la ciudad que lo vio nacer, estuvo desde siempre en las luchas obreras.
Fue dirigente de la UOM de Villa Constitución y uno de los organizadores del Villazo, la huelga general que conmovió a todo el país entre 1974 y 1975, cuando en Argentina y en el mundo comenzaban a aplicarse las políticas neoliberales.
“Pichi”, como le decían sus amigos, compañeros y compañeras, comenzó su acción sindical y gremial en la fábrica siderúrgica de Acindar y en ese ’74, la lista Marrón, que él encabezaba y que representaba al sector más combativo, ganó por el 64% de los votos.
Desde entonces y hasta el golpe militar de 1976, la clase obrera organizada del cordón industrial del Paraná protagonizó asambleas multitudinarias, medidas de fuerza y protestas en defensa de la industria nacional y de los derechos de la clase.
En Acindar hubo 8 detenidos desaparecidos. Piccinini estuvo varios años encarcelado durante la dictadura militar, hasta que fue liberado el 6 de diciembre de 1982.
Tras la recuperación de la democracia, encabezó la lista 6 de Diciembre, la Marrón, que en 1984 se impuso nuevamente, pero con casi el 80% de los votos. Fue ese gran triunfo el que posibilitó normalizar el sindicato y convertirlo en bastión contra las políticas de flexibilización laboral de los ’90.
Piccinini siempre hizo pública su formación marxista y entre 2001 y 2005 fue diputado nacional como parte del Partido Socialista Auténtico. Fue el primer secretario de Relaciones Internacionales de la CTA, cofundador de la Central junto a Víctor De Gennaro, Marta Mafei y otros compañeros y compañeras. También fue fundador y Secretario General de FETIA.
El día que se conoció su muerte, no hubo un trabajador siderúrgico que no lo sintiera. Abuelas de Plaza de Mayo de Rosario también lo homenajearon: «Su lucha por los derechos de los trabajadores nos marcará el camino para recordarnos que la construcción de un país mejor es y será siempre de la mano de lo colectivo».