El pasado miércoles culminó una nueva ronda de negociaciones paritarias entre el gobierno provincial y los representantes docentes, con un resultado que lejos de satisfacer al sector educativo, profundizó el conflicto. Marta Risso, delegada seccional de Amsafe Constitución, expresó en Radio X (90.3 FM / Cadena Regional) su firme rechazo a la propuesta oficial, calificándola como insuficiente.
Según detalló Risso, la oferta del gobierno consiste en un aumento salarial del 8% en tres tramos: 3% en abril, 2,6% en mayo y 2,4% en junio. “Ya veníamos arrastrando un retraso desde la paritaria anterior porque los cálculos de inflación no coincidían con la realidad. Ahora vuelven a ofrecer algo que no alcanza”, afirmó. Además, señaló con preocupación la falta de avances en temas clave como concursos, traslados y titularizaciones, aspectos que quedaron fuera de la discusión.
Uno de los puntos más críticos que mencionó la dirigente sindical es la situación de los docentes jubilados. “Están cobrando aumentos con 60 días de retraso respecto a los activos. Es decir, lo que nosotros recibimos en abril, ellos lo percibirán recién en junio”, explicó. A esto se suma el denominado “aporte solidario”, un descuento del 2% sobre sus jubilaciones que, según Risso, agrava aún más su situación económica. “Un maestro de grado, después de más de 30 años de servicio, cobra menos de 600 mil pesos. Es una realidad desesperante”, lamentó.
Otro tema que generó fuertes críticas fue el pago del presentismo, que el gobierno incluye en los recibos de sueldo como un concepto no remunerativo. “Es dinero en negro que después afecta el cálculo del aguinaldo y las futuras jubilaciones”, denunció Risso. Además, cuestionó el llamado “garantizado” de 75 mil pesos por cargo, que el oficialismo presenta como un complemento salarial. “Es como un préstamo sin intereses, porque después lo descuentan de los futuros aumentos. Si la oferta fuera justa, no harían falta estos parches”, sostuvo.
El descontento se tradujo en una asamblea provincial de Amsafe donde ninguna de las mociones presentadas apoyó la propuesta del gobierno. “Nadie se animó a proponer la aceptación. Eso demuestra el rechazo unánime del sector”, afirmó Risso. Finalmente, se resolvió realizar un paro de 24 horas con actividades regionales, incluyendo una concentración en Villa Constitución donde se hará hincapié en la crítica situación de los jubilados.
Además de las medidas de fuerza, el gremio avanzará en una presentación judicial ante la Corte Suprema para impugnar la reforma previsional. “Consideramos inconstitucional que los jubilados tengan que aportar más de sus magros ingresos y que cobren los aumentos con dos meses de demora”, explicó Risso.
La dirigente cerró su intervención con un llamado a la reflexión: “No somos enemigos del gobierno, somos docentes que queremos trabajar en condiciones dignas. Pero si no nos escuchan, seguiremos en las calles defendiendo lo que es justo”.
Con el paro convocado para este miércoles y la presentación judicial en marcha, el conflicto docente parece lejos de resolverse.